jueves, 26 de marzo de 2015

Clara Secret en Tomelloso


Este grupo de intrépidos detectives son los alumnos de 5º de Primaria del CEIP Doña Crisanta, de Tomelloso.  Animados por su tutor, Javier, no solo están leyendo las aventuras de Clara Secret y Uan, sino que además ejercen de investigadores resolviendo "algunos misterios", según me cuentan en sus correos y cartas. 

Y por si eso fuera poco, han hecho este estupendo dibujo de Clara, Uan y Stephane junto a un acróstico que CS-123 podría firmar como toda una declaración de principios. 
Así que Emma, Arancha, Nuri, María, Lucía, Pablo, Izan, Alfonso, Natalia, Javier, Miriam, Beatriz, José María, Rocío, Carmen, David, Yaiza, Lydia, Jorge, Mónica, Marta, José Antonio, Jaime... 
¡Gracias, chicos!

viernes, 13 de marzo de 2015

Lejos

Lejos
Pablo Albo/Aitana Carrasco
Ed Algar, 2011
+6

Reseña publicada en Revista Adiós. Nov-Dic 2014
Cuando le dijeron a Alberto que su tía Marta se había marchado, decidió ir a buscarla". Así de claro y seguro empieza el viaje de este niño hacia donde le han dicho que se ha ido su tía: Lejos, “allá de donde no se vuelve”. Y este mensaje, en lugar de amedrentarle, refuerza su determinación.
Caminado, cada vez más lejos, preguntará al mar, al viento, a las nubes, al sol y a la luna por su tía. Y cuando todos ellos, después de buscarla, no puedan decirle nada, se dará cuenta de que si no la han encontrado es porque “no está en este mundo”. Entonces, decidirá volver a casa.

En un viaje lleno de sugerentes palabras e imágenes, Alberto buscará solución a la pregunta que los adultos no han sabido responder. Con tesón, esperanza e ingenuidad irá preguntando al resto de personajes y, sin saberlo, llenando su mochila de respuestas. Pero, para entenderlas, deberá llegar hasta el final del recorrido y regresar de nuevo a casa. Solo entonces comprenderá y aceptará el destino de su tía.
Una aventura poética y sutil a través de la que el niño madura y dejará atrás el equipaje con el que salió de casa (las canicas que metió “para no olvidar que era un niño”). Un viaje onírico del que va recogiendo un nuevo equipaje que le ayudará a pasar por las diferentes fases del duelo: incredulidad, tristeza, rabia, huida, resignación y, por último, esperanza encarnada en el rayo cálido que el sol ha escondido al fondo de su mochila.